En parte, uno de los motivos que justifican la baja salud bucal, es que no todos tenían la posibilidad de asistir a una adecuada atención odontológica. Otra razón de peso el crecimiento de la pobreza debido a la guerra, la malnutrición y prestar atención a otras necesidades primarias.
La dentadura pasó a un segundo plano
La dentadura en algunas familias inglesas pasó a un segundo plano a la hora de cubrir las necesidades básicas en tiempos difíciles. Este fue uno de los motivos afectó directamente a la nutrición de las mujeres cuando estaban en gestación. Como consecuencia de da una mala formación y debilidad de la dentadura en los niños y por supuesto en la posterior población.
Algunas personas pensarían que es cuestión de genética, pero realmente la alimentación de la época fue un factor de peso, que trajo severas consecuencias. No solo en Inglaterra se sintieron las secuelas de la pobreza, causada esta por los enfrentamientos bélicos. En muchos países de Europa también se hizo presente, con sus sabidas consecuencias en sus habitantes.
Superando los factores del pasado
Pero después de los enfrentamientos bélicos sufridos, la vida fue tomando un rumbo estable y aparecieron nuevos estilos y rutinas en los ciudadanos. Por ello, en la actualidad, sin pensar en sobrevivir, los ciudadanos ingleses están más preocupados por la salud, higiene y apariencia odontológica.
En primer lugar, consideran las causas que puedan afectar la salud de los dientes pudiéndoles causar algún malestar o dificultad para cumplir su función de masticar. Aunque ya no dejan totalmente de lado la apariencia estética, esto no es precisamente lo que les preocupa depara su saludable sonrisa.
Los ingleses no sufrirán propiamente por su estética dental. Para el más acaudalado habitante inglés, con recursos suficientes para crearse una sonrisa de portada, hasta el humilde ciudadano, la apariencia estética, no robaba su sueño. Basta observar la sonrisa del Rey o de varios miembros del parlamento, hasta hace poco lo más importante era la salud y la higiene dental.
Tanto es así, que Inglaterra fue uno de los países pioneros en el cuidado dental y adelantos de técnicas y servicios odontológicos. Para mediados de 1948, se creó en la nación el Servicio Nacional de Salud (NHS), en donde que incluía, la atención dental de los británicos.
Es solo después, en las dos últimas décadas que los ingleses han optado por incluir la estética dental a su vida cotidiana. Ahora es parte de la rutina de la salud e higiene odontológica de muchos de los británicos, compitiendo en este campo, con el resto del mundo.
Factores que median en el color de la dentadura de las personas
Además, de los factores genéticos diferentes entre las personas, existe una directa relación entre el color de la dentadura y el tono de la piel. En individuos con pieles oscuras, la blancura de la sonrisa destaca indudablemente como un efecto visual de comparación. Por eso, cuando una persona broncea su piel, sus dientes parecen más claro de lo normal, así de sencillo, es por el contraste de tonos.
También es preciso considerar la edad de la persona al apreciar su dentadura. Con el paso del tiempo se va produciendo un desgaste del esmalte que afecta la apariencia dental.
También algunas bebidas, como el café, el té y el vino, hacen que los dientes se tornen un poco más amarillentos de lo normal. Por eso la creación de diversos productos que ayudan en una buena higiene bucal.
Los factores alimenticios que crean problemas
Un punto de partida que es necesariamente importante es tener la alimentación adecuada, rica de las suficientes vitaminas y minerales, para desarrollar una buena dentadura. En estudios recientes, odontólogos británicos notaron que la ingesta de algunos alimentos afecta directamente la mala formación de los dientes y la aparición frecuente de caries.
La insuficiencia de una variedad de alimentos frescos, con fibras y proteínas, como vegetales, hortalizas y frutas, cobra su cuota. El desarrollo de la dentadura de los ingleses se vio afectada en parte por ello. También, el consumo de dulces en exceso perjudica, siendo uno de los enemigos para la salud bucal, al favorecer la aparición de sarro y placa dental.
Abajo los estereotipos antiguos y mala publicidad
Podría decirse que la afirmación de que los ingleses tienen mala dentadura en la actualidad no es realidad. Ese mito creado y muchas veces reflejado algunos en programas de televisión, como show, series animadas o comedias, debería ser superado y pasar la página.
Desde el personaje de ficción, Austin Powers, hasta algunos episodios de los Simpsons o South Park, la singularidad dental de los británicos, ha sido cuestionada. Podría decirse, que algunos productores creativos llevan años burlándose de la dentadura de los ingleses, es tiempo de superar este concepto mostrando la actual imagen inglesa.
También se ha presentado la comercialización de variados tratamientos odontológicos, algunos justificados, otros no tanto, reforzando la imagen de una sonrisa extra blanca, pero, poco natural. Ahora, analizando la realidad, la dentadura de un ser humano británico o no, no debería ser impuesta por una creada estética comercial o exageradamente blanca.